
Viviendo en un sitio donde no es raro que llueva durante tres semanas seguidas no queda más remedio que tirar de ingenio para poder seguir patinando.
Navia se esta convirtiendo en un filón, ya publiqué una entrada describiendo otra bajadita que hay en este barrio y ahora esta.
Detrás de un edificio y cubierta, es muy entretenida porque va alternando bajadas con zonas llanas y todos los bordillos están rematados con acero, lo que los hace ideales para grindar (a dia de hoy yo paso).

Así que ya sabeis, cuando no pare de llover y el mono apriete fuerte, ya no hay motivo para quedarse en casa.
Al final aparecio algo...
ResponderEliminarMe gusta el blog.
ResponderEliminarA la lista (si no te importa)
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